“Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría, pídala a Dios, el cual da a todos abundantemente y sin reproche, y le será dada.” Santiago 1:5
Quizás al comienzo de nuestra vida Cristiana no podemos identificar nuestra falta de sabiduría, pero conforme vamos conociendo la palabra de Dios y enfrentamos circunstancias diferentes y no sabemos que hacer entonces nos damos cuenta que quizás nos falte sabiduría. En el mundo la sabiduría está ligado sólo al conocimiento mientras que la Biblia nos enseña que “El principio de la sabiduría es el temor de Jehová; Los insensatos desprecian la sabiduría y la enseñanza.” Proverbios 1:7
Entonces debemos comenzar por entender que la sabiduría que necesitamos comienza por reconocer a Dios todopoderoso y aprender de El, sin embargo no debemos quedarnos solo con el
Conocimiento porque sólo tendríamos la sabiduría del mundo no la que proviene de Dios
“Pero la sabiduría que es de lo alto es primeramente pura, después pacífica, amable, benigna, llena de misericordia y de buenos frutos, sin incertidumbre ni hipocresía.” Santiago 3:17 como vemos la sabiduría es más que sólo conocimiento es además del conocimiento de Dios la aplicación en nuestra vida diaria a través de nuestras actitudes en las diferentes circunstancias por las que atravesamos en nuestras vidas. Una actitud pacífica, amable, benigna llena de misericordia no se obtiene sólo con conocimiento por eso es necesario pedírsela a Dios y el nos la dará abundantemente. Necesitamos sabiduría cada día, aún para las situaciones aparentemente insignificantes en nuestra vida porque cada una de nuestras acciones tendrán repercusión. Seamos sabias y no necias, busquemos la dirección de Dios para cada circunstancia y obremos de acuerdo a lo que dice Dios y no el mundo. Parte de la sabiduría de Dios es usar su armadura para enfrentar los problemas usémosla y obtendremos la victoria de acuerdo a la voluntad de Dios. Apliquemos hoy sabiduría a cada uno de los problemas que enfrentemos y alabemos a Dios. Bendecido día hermanas